Un estudio reciente por la Universidad Purdue reportó la cantidad de colorantes artificiales de alimentos comunes. Los resultados son muy preocupantes ya que la cantidad de algunos de ellos excede las cantidad de 35 miligramos, establecida en estudios médicos como peligrosa para los niños. El estudio demostró que las bebidas como jugos, refrescos y bebidas deportivas son las que más colorantes tienen, seguidas de alimentos como cereales ( ej. trix y froot loops 36.4 mg) , dulces (ej. skittles y m&ms 17.6 mg) y comidas ( ej. macaron con queso de Krafts 17.6 mg) entre otros. Aunque en realidad los puedes encontrar donde menos imaginas como vitaminas para niños, yogur comercial, gelatinas y medicamentos.
De acuerdo al estudio el consumo per cápita de colorantes se ha quintuplicado entre 1950 y 2012. Se estiman que un niño promedio consume aprox 100 mg de colorantes al día y en ocasiones esa cantidad llega fácilmente hasta 200 mg / día.
No es de alarmarse que los problemas conductuales como hiperactividad y déficit de atención, impulsividad, alergias, cáncer y otras enfermedades estén en aumento.
Colorantes como el rojo 2, rojo 3, rojo 40, amarillo 5, amarillo 6, azul1, azul 2 y verde 3, son derivados del petróleo y del alquitrán y de acuerdo al Centro de Ciencia para el Interés Público ( CSPI) en muchas ocasiones también se encuentran contaminados con químicos que originan cáncer . En Europa la ley requiere que todos los alimentos que los contengan tengan una leyenda que advierta sobre los riesgos de su consumo. En Noruega y Finlandia el amarillo 5 o tartrazina esta prohibido. En Canadá el Rojo 40 y Amarillo 5 y 6 también. Compañías como Coca-cola y Krafts han removido estos colorantes tóxicos de sus productos que venden en Europa pero no así en Estados Unidos ni Latinoamérica.
En 2001 la FDA acepto que los colorantes y otros ingredientes causan problemas conductuales. En 2008, la CSPI le pidió a la FDA que prohibiera el uso de ellos y mientras tanto pidiera que las compañías que los fabrican pongan etiquetas alertando a sus consumidores pero no se ha hecho nada al respecto. Mientras tanto lo que podemos hacer es:
1.- Limitar el consumo de alimentos procesados, consumirlos solo en poca cantidad y que sean una excepción en tu alimentación y la de tu familia
2.- Leer siempre las etiquetas. Si hay ingredientes que no entiendes y que además parecen ser ingredientes de un laboratorio y no de una cocina entonces no lo compres.
2.- Buscar alternativas a productos comerciales y prepararlas en casa… yo puedo ayudarte!. Por ejemplo aquí te dejo esta receta de una gelatina casera sin colorantes ni conservadores.
3.- Compartir esta información con la mayor cantidad de personas posibles, ya que finalmente si los productos no se venden a las grandes compañías no les va a quedar más remedio que mejorar los alimentos que nos ofrecen.
Por supuesto que puedes compartir ¡Compartir es querer!
juliana Arias says
July 18, 2016 at 1:45 amSaludos.
estoy muy interesada en conocer un poco más sobre el estudio de la Universidad de Pardue u otras Universidades que hayan logrado relacional el consumo de colorantes artificiales con problemas de salud. Podrías colaborarme con un enlace o con el nombre del estudio o la publicación?
Muchas gracias
Isabel says
July 18, 2016 at 3:10 amClaro Juliana,
http://cpj.sagepub.com/content/early/2014/04/21/0009922814530803.abstract
Saludos